Cebolla encurtida crujiente y rápida (Jangajji)
Receta rápida de 5 minutos para cebolla encurtida sencilla y deliciosa
Una receta súper rápida para cebollas encurtidas crujientes y de sabor suave que puedes preparar en solo 5 minutos.
Ingredientes
- 400 ml de Agua
- 50 ml de Salsa de Soja
- 50 ml de Azúcar
- 50 ml de Vinagre
- 2 Cebollas
- 2-3 Chiles Verdes Coreanos (opcional, ajustar al gusto)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, preparemos la salmuera para encurtir, el corazón de estas deliciosas cebollas encurtidas. En una olla, combine 400 ml de agua, 50 ml de salsa de soja, 50 ml de azúcar y 50 ml de vinagre. Mezcle bien. Coloque la olla a fuego medio y revuelva hasta que el azúcar se disuelva por completo. Una vez que comience a hervir, apague el fuego inmediatamente y deje que se enfríe un poco. Este proceso ayuda a que los sabores se mezclen maravillosamente y crea un sabor más limpio.
Step 2
A continuación, prepararemos el ingrediente principal: las cebollas. Tome 2 cebollas frescas. Pélelas y enjuáguelas bien. Corte cada cebolla en 6 gajos. Intente no cortarlas demasiado finas para que conserven su crujido después de encurtirlas. Hacer algunos cortes superficiales puede ayudar a que se separen en capas, permitiendo que la salmuera penetre mejor.
Step 3
Ahora, agreguemos un toque picante con los chiles verdes coreanos. Prepare 2-3 chiles verdes frescos. Puede ajustar la cantidad según su preferencia de picante. Lave los chiles y córtelos en rodajas finas. Cortarlos no demasiado finos asegurará que su aroma y sabor se incorporen bien a las cebollas encurtidas.
Step 4
¡Es hora de ensamblar nuestras cebollas encurtidas! Coloque los gajos de cebolla preparados en un recipiente hermético. Separe suavemente las capas de cebolla mientras las coloca para asegurar una distribución uniforme de la salmuera. Esparza los chiles verdes en rodajas por encima. Finalmente, vierta la salmuera ligeramente enfriada sobre las cebollas y los chiles, asegurándose de que estén completamente sumergidos. Selle el recipiente y refrigere durante al menos un día antes de servir. ¡Disfrute de sus cebollas encurtidas increíblemente crujientes y deliciosamente ácidas, perfectas como guarnición o acompañamiento para cualquier comida!
