Ginkgo Salteado y Sabroso: Bocadillo Nostálgico y Acompañamiento Perfecto para Cerveza
Revive Tu Infancia con Deliciosos Ginkgo Salteados: ¡Un Bocadillo y Acompañamiento de Cerveza Perfecto! 🥜🍺
Esta receta evoca cálidos recuerdos de mi madre calentando semillas de ginkgo en un cartón de leche en el microondas. Las semillas de ginkgo no solo son un bocadillo delicioso por sí solas, sino que también combinan maravillosamente con una cerveza fría. Sin embargo, es importante disfrutarlas con moderación, ya que consumir demasiadas puede causar malestar digestivo debido a un compuesto llamado ginkgotoxina. Esta receta utiliza semillas de ginkgo congeladas para mayor facilidad y rapidez, guiándote a crear deliciosas semillas de ginkgo salteadas sin esfuerzo.
Ingredientes
- Semillas de ginkgo, 2 puñados (aprox. 100-150 g)
- Aceite de cocina, abundante (aprox. 3-4 cucharadas)
- Sal, 1 cucharadita
Instrucciones de preparación
Step 1
Para esta receta, usamos semillas de ginkgo congeladas disponibles comercialmente. Usar las congeladas facilita significativamente el pelado de las cáscaras. Si usas semillas de ginkgo frescas, blanquéalas ligeramente en agua hirviendo antes de intentar pelarlas.
Step 2
Cubre generosamente el fondo de una sartén con aceite de cocina. Es crucial usar suficiente aceite para asegurar que las semillas de ginkgo se cocinen de manera uniforme sin quemarse.
Step 3
Una vez que el aceite se haya calentado suavemente a fuego medio-bajo, agrega todas las semillas de ginkgo preparadas a la sartén. Ten cuidado con el calor; una temperatura demasiado alta puede hacer que las semillas se quemen rápidamente.
Step 4
Después de agregar las semillas de ginkgo, muévelas continuamente con una espátula de madera o palillos mientras se saltean. Notarás que comienzan a dorarse ligeramente y a desprender un delicioso aroma a nuez.
Step 5
A medida que las semillas de ginkgo comienzan a saltearse y sus cáscaras se agrietan ligeramente, es hora de pelarlas. Un consejo útil es colocar las semillas entre dos hojas de papel de cocina y presionar suavemente; las cáscaras deberían desprenderse fácilmente. Si no tienes papel de cocina, puedes usar con cuidado la punta de un palillo de madera para empujar la cáscara y separarla de la semilla. ¡Ten cuidado ya que podrían estar calientes!
Step 6
Una vez que se hayan quitado todas las cáscaras, agrega 1 cucharadita de sal a la sartén. Puedes ajustar la cantidad de sal a tu preferencia personal.
Step 7
Reduce el fuego a bajo y mezcla bien las semillas de ginkgo para asegurar que estén uniformemente cubiertas con la sal. Continúa salteando a fuego bajo durante 1-2 minutos más. ¡Tus sabrosas y deliciosas semillas de ginkgo salteadas están listas! Saben mejor servidas calientes.
