¡Descubra la magia de cómo una verdura sencilla y económica se transforma en un impresionante plato complementario! Estas tortitas de calabacín, conocidas como Aehobakjeon, ofrecen una deliciosa textura tierna por dentro y ligeramente crujiente por fuera, gracias a un rebozado de huevo dorado. Son increíblemente sabrosas, con un dulzor sutil que encanta tanto a niños como a adultos, siendo un acompañamiento perfecto para el vino de arroz coreano (makgeolli). Cada bocado le brindará una satisfacción única y un sabor dulce que le dibujará una sonrisa.