Receta Fácil para Hacer Semillas de Perilla en Polvo Caseras: Llenas de Sabor
Receta Fácil para Hacer Semillas de Perilla en Polvo Caseras: Llenas de Sabor
Cómo Preparar Semillas de Perilla en Polvo Frescas en Casa
Descubre cómo hacer tu propio polvo de semillas de perilla (shiso) en casa, tostando y moliendo las semillas frescas. ¡Mejora el sabor de tus platos con este ingrediente casero lleno de aroma!
Ingredientes Esenciales- Semillas de perilla
Instrucciones de preparación
Step 1
Llena un bol grande con abundante agua limpia. Añade las semillas de perilla al bol y remueve suavemente. Notarás que las semillas frescas flotan en la superficie, mientras que las impurezas como tierra o pequeñas piedras se hundirán al fondo. Este paso ayuda a eliminar las partículas no deseadas inicialmente.
Step 2
Vierte con cuidado las semillas de perilla del bol a un colador de malla fina. Deja cualquier sedimento en el fondo del bol y recoge las semillas de perilla que flotan en el colador. Inspecciona visualmente y retira cualquier piedra pequeña o tierra restante. Repite este proceso de enjuague de 2 a 3 veces para asegurar que las semillas de perilla estén lo más limpias posible.
Step 3
Frota y lava suavemente las semillas de perilla limpias en el colador con las manos. Enjuágalas ligeramente bajo el chorro de agua para eliminar cualquier residuo. Es crucial eliminar la mayor cantidad de humedad posible después de lavarlas. Puedes presionarlas suavemente con un paño o papel de cocina para absorber el exceso de agua.
Step 4
Ahora es el momento de tostar las semillas de perilla. Precalienta una sartén a fuego medio-alto, luego añade las semillas de perilla escurridas y comienza a tostarlas. Empezar a fuego medio-alto ayuda a evaporar rápidamente cualquier humedad restante de las semillas.
Step 5
Continúa removiendo las semillas de perilla constantemente para evitar que se quemen. Dependiendo de la cantidad de semillas y la intensidad del fuego, es aconsejable reducir el fuego a medio-bajo después de un período inicial de tostado. Un sonido como ‘tac-tac-tac’, un ligero chisporroteo, indica que las semillas se están tostando bien. Para comprobar si están perfectamente tostadas, frota unas pocas semillas entre los dedos; si las cáscaras se desprenden fácilmente, ¡están listas! Ten cuidado de no tostar en exceso hasta el punto de quemarlas.
Step 6
Una vez perfectamente tostadas, retira las semillas de perilla de la sartén y déjalas enfriar completamente. Molerlas mientras aún están calientes puede desafilar las cuchillas de la licuadora o hacer que los aceites aromáticos se evaporen. Una vez frías, muele las semillas de perilla hasta obtener un polvo fino usando una licuadora o un mortero. Para una textura aún más fina, puedes tamizar el polvo resultante a través de un colador de malla fina una o dos veces. ¡Felicidades, has hecho polvo de semillas de perilla casero, fresco y sabroso! Disfruta usándolo para realzar tus platos favoritos.
