El Gimbap y la sopa de Odeng (pastel de pescado) son una combinación culinaria celestial. Si bien preparar todos los ingredientes del Gimbap puede ser un poco laborioso, el acto de comer un Gimbap casero se siente como una comida simple y satisfactoria. El Gimbap comprado en tienda puede parecer fácil, pero preparar cada componente desde cero en casa ciertamente no es algo sencillo. Entonces, ¿por qué molestarse en hacer Gimbap en casa? Hay una cierta energía que posee el Gimbap casero, diferente de las versiones compradas en tienda. Es difícil de explicar, pero el Gimbap casero tiene una mezcla armoniosa de confort, calidez, salubridad y familiaridad que realmente deleita el paladar. En contraste, incluso el Gimbap comprado en tienda más delicioso a menudo se siente como si le faltara algo, esa ‘deficiencia del 2%’. Por eso continuamos haciéndolo nosotros mismos. La sopa de Odeng, especialmente con pasteles de pescado finos y planos, es maravillosamente masticable y sabrosa, complementando verdaderamente el Gimbap. Si preparar los ingredientes del Gimbap le parece tedioso, haga una tanda generosa y disfrute las sobras como guarniciones, o úselas para crear ‘Gimbap de aut made’ colocando ingredientes sobre algas para su próxima comida. ¡Volver a enrollarlos en Gimbap al día siguiente también es una excelente manera de usar las sobras!