Galletas de Chocolate Intensas y Suaves
Galletas de Chocolate Intensas y Suaves
Receta Casera de Galletas Ricas de Chocolate Tipo Brownie (Galletas con Chispas de Chocolate)
Presentamos unas galletas intensamente chocolatadas con un contraste delicioso: un exterior crujiente y un interior húmedo y masticable. Hechas con chocolate negro derretido y cacao en polvo para un sabor a chocolate profundo, estas galletas están generosamente cubiertas con chispas de chocolate para explosiones de dulzura en cada bocado. Son perfectas para hacer con antelación y guardar en el congelador para un capricho rápido y satisfactorio cuando surja un antojo de chocolate.
Ingredientes- 100g de Chocolate Negro (finamente picado)
- 30g de Mantequilla sin sal
- 1 Huevo grande (a temperatura ambiente)
- 30g de Azúcar granulada
- 1 Cucharada de Cacao en polvo (sin azúcar)
- 1 Cucharadita de Levadura en polvo (polvo de hornear)
- 50g de Harina de repostería (o harina de trigo común)
- Pizca de Sal
- 50g de Chispas de chocolate (más o menos, a tu gusto)
Instrucciones de preparación
Step 1
Para empezar, coloca el chocolate negro finamente picado (100g) y la mantequilla sin sal (30g) en un bol resistente al calor. Picar el chocolate en trozos muy pequeños ayudará a que se derrita más fácilmente.
Step 2
Llena una cacerola con unos 2-3 cm de agua y caliéntala a fuego medio-bajo. Una vez que el agua empiece a hervir suavemente, apaga el fuego. Coloca el bol con el chocolate y la mantequilla sobre la cacerola, asegurándote de que la base del bol no toque el agua. Remueve suavemente con una espátula o varillas hasta que el chocolate y la mantequilla se derritan por completo y queden lisos. El baño maría ayuda a evitar que el chocolate se queme o se corte.
Step 3
En otro bol, casca el huevo a temperatura ambiente (1) y añade el azúcar granulada (30g). Bate hasta que el azúcar se disuelva mayormente. No es necesario batir en exceso; el objetivo es simplemente combinarlos bien.
Step 4
Vierte la mezcla de chocolate y mantequilla derretidos en la mezcla de huevo y azúcar. Bate todo hasta que esté suave y bien combinado, creando una masa de chocolate brillante.
Step 5
Tamiza el cacao en polvo (1 cucharada), la levadura en polvo (1 cucharadita), la harina de repostería (50g) y una pizca de sal en otro bol. Tamizar ayuda a airear los ingredientes secos y a evitar grumos, asegurando que se incorporen uniformemente a la masa.
Step 6
Añade los ingredientes secos tamizados a la masa de chocolate. Usando una espátula o raspador, incorpóralos suavemente hasta que no queden rastros de harina seca. Ten cuidado de no mezclar en exceso, ya que esto puede resultar en galletas duras.
Step 7
Finalmente, añade las chispas de chocolate (50g) a la masa y mézclalas suavemente hasta que estén distribuidas uniformemente por toda la masa.
Step 8
Cubre la masa con film transparente o colócala en un recipiente hermético. Refrigera durante al menos 30 minutos. Enfriar la masa facilitará la formación de bolas y ayudará a que las galletas mantengan mejor su forma al hornearse.
Step 9
Mientras el horno se precalienta a 180°C (350°F), usa una cuchara para helado o dos cucharas para porcionar la masa fría sobre una bandeja para hornear cubierta con papel de hornear. Deja suficiente espacio entre cada galleta ya que se expandirán. Hornea en el horno precalentado durante aproximadamente 10 minutos. El tiempo de horneado puede variar según tu horno.
Step 10
Las galletas recién sacadas del horno parecerán blandas y quizás un poco frágiles. Para evitar que se rompan, desliza con cuidado el papel de hornear con las galletas sobre una rejilla de enfriamiento. Déjalas reposar sobre el papel de hornear durante unos minutos para que se endurezcan un poco.
Step 11
Una vez ligeramente enfriadas sobre el papel, transfiere con cuidado las galletas directamente a la rejilla de enfriamiento. Deja que se enfríen por completo. Al enfriarse, desarrollarán un delicioso exterior crujiente y un centro maravillosamente húmedo y masticable.
