Buñuelos de Ajenjo Crujientes y Aromáticos: Un Sabor Primaveral
Receta Creativa de Buñuelos de Ajenjo Primaveral: Disfruta el Ajenjo de Forma Deliciosa
La primavera nos trae una variedad de alimentos deliciosos, y el ajenjo es uno de ellos, comúnmente usado en sopas o guisos. ¡Esta vez, te presentamos una forma diferente y exquisita de disfrutar el ajenjo: buñuelos crujientes! La fragancia única del ajenjo se combina con la deliciosa textura crujiente del rebozado para crear una experiencia culinaria especial. Descubre el sabor de la primavera con estos buñuelos de ajenjo sencillos pero irresistibles.
Ingredientes Principales
- 1 manojo de ajenjo fresco de primavera (aprox. 50g)
- 1 taza de mezcla para tempura (aprox. 100g)
- 1 taza de agua con gas fría (aprox. 180ml)
- Aceite vegetal para freír (cantidad generosa)
- Azúcar (al gusto) una pizca
Salsa para Mojar de Soja
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1 cucharada de vinagre
- 1/3 cucharada de hojuelas de chile rojo
- Un poco de semillas de sésamo tostado
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1 cucharada de vinagre
- 1/3 cucharada de hojuelas de chile rojo
- Un poco de semillas de sésamo tostado
Instrucciones de preparación
Step 1
En primer lugar, prepara el ajenjo fresco de primavera. Lava suavemente las hojas de ajenjo varias veces bajo agua corriente para eliminar cualquier suciedad o residuo. Después de enjuagar, coloca el ajenjo en un colador y sacude ligeramente para eliminar el exceso de agua. Si hay demasiada humedad, la masa no se adherirá bien. Para obtener mejores resultados, seca suavemente con papel de cocina para eliminar cualquier resto de agua.
Step 2
Al ajenjo escurrido, añade 1-2 cucharadas de la mezcla para tempura. Remueve suavemente el ajenjo para que quede ligeramente cubierto. Este paso ayuda a que la masa se adhiera mejor y preserva la fragancia natural del ajenjo, asegurando una capa fina para que el sabor destaque.
Step 3
Ahora, preparemos la masa crujiente. En un bol limpio, combina 1 taza de mezcla para tempura con 1 taza de agua con gas bien fría. El secreto para obtener una masa extra crujiente es el agua con gas: sus burbujas crean una masa más ligera y aireada. Mezcla solo hasta que se combinen; evita mezclar en exceso, ya que esto eliminará la carbonatación.
Step 4
Agrega el ajenjo ligeramente cubierto a la masa y remueve suavemente hasta que cada pieza esté uniformemente recubierta. Asegurar una cobertura uniforme es crucial para lograr esa deliciosa textura crujiente al freír.
Step 5
Calienta una cantidad generosa de aceite vegetal en una sartén profunda a fuego medio. La temperatura del aceite es clave: si está demasiado bajo, el ajenjo absorberá demasiado aceite; si está demasiado alto, se quemará por fuera antes de cocinarse por dentro. Prueba la temperatura dejando caer una pequeña cantidad de masa en el aceite; debería chisporrotear y flotar a la superficie inmediatamente. Con cuidado, introduce el ajenjo rebozado en el aceite caliente, evitando llenar demasiado la sartén. Fríe durante un corto tiempo hasta que esté dorado y crujiente por ambos lados. El ajenjo se cocina rápidamente, así que evita freírlo en exceso.
Step 6
Una vez dorados y crujientes, retira los buñuelos del aceite y colócalos sobre papel de cocina para escurrir el exceso de grasa. ¡Ahora, a disfrutar! Están deliciosos servidos calientes tal cual. Si lo prefieres, espolvorea azúcar al gusto para un toque dulce. Alternativamente, mójalos en la salsa de soja preparada para un sabor salado y ligeramente picante. Para hacer la salsa, simplemente mezcla 1 cucharada de salsa de soja, 1 cucharada de vinagre, 1/3 cucharada de hojuelas de chile rojo y un poco de semillas de sésamo tostado.