Bolitas de Rodaballo con Piel Crujiente
Bolitas de Rodaballo con Piel Crujiente
¡Crujientes por fuera, tiernas por dentro! Bolitas de rodaballo con una sinfonía de texturas y sabores, coronadas con irresistible piel de rodaballo frita.
Disfruta del delicioso contraste de la carne tierna y sabrosa del rodaballo, complementada por el satisfactorio crujido del corazón de repollo y el rábano finamente picados en estas exquisitas bolitas de rodaballo. Un toque de pimiento picante coreano (cheongyang pepper) añade un delicioso matiz, realzando el perfil de sabor. Como un bono especial, coronaremos estas hermosas y deliciosas bolitas de rodaballo con piel de rodaballo frita y crujiente para una textura inolvidable. ¡Perfectas para una ocasión especial o una comida casera única!
Ingredientes Principales- 1 Rodaballo (limpio)
- 1 puñado de Corazón de repollo
- 1 puñado de Rábano
- 2 Cucharadas de pimientos Cheongyang (picados)
- 1 Huevo
- 1/2 taza de Harina de trigo común
- Abundante aceite vegetal (para freír)
- Un poco de Cebolleta (picada, para decorar)
Condimentos y Otros- 1/2 cucharadita de Sal (para la masa) + una pizca (para la piel)
- 1/2 cucharadita de Ajo picado
- Pizca de Pimienta negra
- 1/2 cucharadita de Sal (para la masa) + una pizca (para la piel)
- 1/2 cucharadita de Ajo picado
- Pizca de Pimienta negra
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, prepara tu rodaballo limpio. Será más fácil si lo compras con la piel puesta.
Step 2
Filetea con cuidado el rodaballo, separando la carne de la piel. Reserva tiras de piel de aproximadamente 3 cm de ancho y 15 cm de largo para freír. Desecha el resto de la piel.
Step 3
Pica finamente la carne del rodaballo, pero evita hacerla una pasta. Quieres que conserve algo de textura. Una buena técnica es usar el lado plano de tu cuchillo para presionar y picar, dejando trozos pequeños.
Step 4
Pela el rábano y córtalo en dados muy pequeños, del tamaño de la uña del dedo meñique. Esto asegura un crujido agradable.
Step 5
De manera similar, pica el corazón firme de la col en trozos pequeños, aproximadamente del mismo tamaño que el rábano picado. El corazón ofrece una dulzura y un crujido únicos.
Step 6
Reserva unas tres o cuatro trozos pequeños de los pimientos cheongyang para decorar. Pica finamente los pimientos restantes. Si te gusta más picante, no dudes en añadir más.
Step 7
En un bol grande, combina la carne de rodaballo picada con el rábano, el corazón de repollo y los pimientos cheongyang picados.
Step 8
Añade la mayor parte de la harina de trigo común al bol, reservando aproximadamente una cucharada para más tarde. Esto ayudará a unir la mezcla.
Step 9
Casca el huevo, luego añade la 1/2 cucharadita de sal (para la masa), 1/2 cucharadita de ajo picado y una pizca de pimienta negra. (¡Importante: Reserva una pizca de sal específicamente para sazonar la piel del rodaballo!) Mezcla todo a fondo con las manos, amasando hasta que se forme una mezcla cohesiva. Si la mezcla se siente demasiado húmeda, añade un poco más de la harina reservada.
Step 10
Calienta una sartén a fuego medio y añade una cantidad generosa de aceite vegetal. Usando una cuchara, saca porciones de la mezcla de rodaballo y colócalas con cuidado en el aceite caliente, dándoles forma de bolitas redondas. Procura que sean del tamaño de un bocado.
Step 11
Una vez que las bolitas de rodaballo estén doradas por un lado, usa dos cucharas para voltearlas y hacerlas rodar suavemente, asegurándote de que se cocinen de manera uniforme y queden doradas por todas partes. Ten paciencia y cocina hasta que el interior esté completamente hecho.
Step 12
Prepara la piel de rodaballo reservada cortándola en tiras largas como planeado. Justo antes de freír, espolvorea ligeramente la piel con la pizca de sal reservada. Esto añade un poco de sabor a la piel crujiente.
Step 13
Para que la sal se adhiera, reboza ligeramente las tiras de piel de rodaballo salada en la cucharada de harina reservada. Sacude suavemente el exceso de harina.
Step 14
Coloca con cuidado la piel de rodaballo enharinada en el aceite caliente y fríe hasta que esté maravillosamente crujiente. Ten cuidado, ya que la piel se fríe muy rápido. Una vez dorada y crujiente, retírala inmediatamente del aceite y escúrrela sobre papel de cocina.
Step 15
Coloca las bolitas de rodaballo cocidas de manera atractiva en un plato de servir. Cúbrelas con la piel de rodaballo frita y crujiente. Decora con los trozos de pimiento cheongyang rojo reservados y la cebolleta picada. ¡Tus bolitas de rodaballo, bellamente presentadas e increíblemente deliciosas, están listas para ser disfrutadas!
