Bolas de Castañas y Queso: Crujientes y Masticables
Bolas de Castañas y Queso: Crujientes y Masticables
¡Prepara Bolas de Castañas y Queso Crujientes y Masticables!
¡Prepara un delicioso y nutritivo snack con castañas tiernas! Prueba a hacer estas deliciosas bolas de castañas y queso, con una maravillosa combinación de queso mozzarella elástico. ¡Disfruta preparándolas!
Ingredientes- 25 Castañas
- 1 taza de almidón de patata
- 1 bolsa de queso mozzarella
- 2/3 cucharada de azúcar
- Una pizca de sal
- 4 huevos
- 1 taza de harina de trigo común
- 2/3 taza de leche
- 1 taza de pan rallado
Instrucciones de preparación
Step 1
¡El primer paso para hacer deliciosas bolas de castañas y queso! Lava bien las castañas bajo el grifo. Luego, llena un bol con abundante agua fría y remoja las castañas durante aproximadamente 1 hora. Esto ablandará las cáscaras, facilitando su pelado. Haz un corte en forma de cruz (+) de aproximadamente 1 cm de profundidad en las puntas puntiagudas de las castañas remojadas. Coloca las castañas cortadas en una olla, cúbrelas con agua y hierve durante unos 30 minutos. Una vez hervidas, sumérgelas inmediatamente en agua fría para que se enfríen. Luego, pela la cáscara siguiendo las líneas del corte; la pulpa de la castaña debería separarse fácilmente.
Step 2
Las castañas hervidas y remojadas tienen cáscaras blandas que se pueden pelar fácilmente a mano. Gracias al proceso de corte e ebullición, la pulpa de la castaña se separará suavemente de la cáscara.
Step 3
Coloca las castañas peladas en un bol y máchalas finamente usando el dorso de un tenedor o una cuchara. Machacarlas hasta que queden tiernas y sin grumos es clave para que la masa se una bien y se logre una textura suave. Si no tienes castañas o quieres usar un sustituto, ¡el boniato cocido y machacado también funciona de maravilla!
Step 4
Ahora, ¡hagamos la masa para las bolas de castañas y queso! En el bol con las castañas machacadas, añade el almidón de patata, el azúcar y la sal, y mezcla primero los ingredientes secos. A continuación, añade gradualmente la leche mientras remueves para ajustar la consistencia de la masa. No viertas toda la leche de golpe; añádela poco a poco, comprobando el grosor de la masa. Busca una masa suave que no sea demasiado pegajosa y que pueda mantener su forma al moldearla. (Consejo: Usar harina de arroz glutinoso en lugar de almidón de patata te dará una textura más masticable).
Step 5
Casca 4 huevos en un bol aparte y bátelos bien para hacer una mezcla de huevo. Esto se usará para rebozar las bolas de queso antes de freírlas.
Step 6
Toma aproximadamente una cucharada de la masa de castaña y aplánala en forma de disco redondo en la palma de tu mano. Presiona ligeramente el centro para crear un hueco y luego coloca una cantidad deseada de queso mozzarella en su interior. Ten cuidado de no rellenar en exceso con queso, ya que podría salirse durante la fritura.
Step 7
Reúne con cuidado los bordes de la masa para encerrar completamente el queso, sellándolo bien. Luego, ruédala entre tus manos para formar una bonita bola redonda. Asegúrate de que las costuras estén bien selladas para evitar que el queso se escape mientras se fríe.
Step 8
Reboza uniformemente las bolas de castañas y queso moldeadas con harina de trigo común. Asegúrate de que toda la superficie quede cubierta con una fina capa de harina. Este paso ayuda a que los rebozados posteriores se adhieran mejor.
Step 9
Sumerge las bolas de castañas y queso rebozadas en harina en la mezcla de huevo preparada, asegurándote de que queden completamente cubiertas. Sacude suavemente el exceso de mezcla de huevo.
Step 10
Finalmente, coloca una cantidad generosa de pan rallado en un plato poco profundo. Rueda las bolas de queso bañadas en huevo en el pan rallado, presionando suavemente para asegurarte de que queden completamente cubiertas. El pan rallado crea bolsas de aire, lo que contribuye a una textura más crujiente al freírlas.
Step 11
Calienta aceite de cocina en una sartén profunda a fuego medio-bajo. Ten cuidado, ya que el aceite demasiado caliente puede quemar el exterior mientras deja el interior sin cocinar. Coloca con cuidado las bolas de castañas y queso rebozadas en pan rallado en el aceite. Ródalas suavemente para asegurar que todos los lados se frían hasta obtener un color dorado. Freír a fuego medio-bajo permite que el interior se cocine por completo y que el queso se derrita perfectamente.
Step 12
Una vez que las bolas de queso adquieran un apetitoso color marrón dorado y estén bien fritas, retíralas del aceite y colócalas sobre un plato forrado con papel de cocina para escurrir el exceso de aceite. ¡Sírvelas inmediatamente mientras están calientes para disfrutar de un exterior crujiente y un interior deliciosamente elástico y pegajoso! Si lo deseas, puedes servirlas con ketchup o una salsa dulce.
