
Buñuelos de Calabacín Crujientes y Tiernos
Buñuelos de Calabacín Crujientes y Tiernos
Receta Fácil y Deliciosa de Buñuelos de Calabacín Caseros
Descubre el secreto para unos buñuelos de calabacín perfectos: crujientes por fuera y tiernos por dentro, gracias a un corte fino y un método de drenaje especial.
Ingredientes Esenciales- 1/2 calabacín mediano
- 1 taza de mezcla para freír (Buchim Garu)
- 2 huevos
- Una pizca de sal de hierbas
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, lava bien el calabacín y sécalo por completo. Luego, córtalo en rodajas lo más finas posible, de aproximadamente 3-4 mm de grosor. Un corte fino asegurará una textura más crujiente.
Step 2
Extiende las rodajas finas de calabacín en un plato ancho, tratando de que no se superpongan demasiado. Espolvorea sal de hierbas uniformemente sobre toda la superficie, asegurándote de cubrir cada rincón.
Step 3
Cubre el plato con film transparente y déjalo en el refrigerador durante 30 minutos a 1 hora. Este paso permitirá que el calabacín suelte su exceso de humedad, lo que hará que los buñuelos queden más tiernos y menos aguados al cocinarlos. Después, presiona suavemente con papel de cocina para absorber cualquier humedad superficial y el exceso de sal. Este paso es clave para conseguir buñuelos crujientes.
Step 4
Ahora, preparemos la mezcla para rebozar. Extiende 1 taza de la mezcla para freír en otro plato. En un cuenco aparte, bate 2 huevos. (Consejo: Si prefieres no tener espuma o quieres sazonar la mezcla, añade unas dos pizcas de sal a los huevos. Alternativamente, si no te gusta el rebozado de huevo, puedes simplemente espolvorear un poco de sal directamente sobre los buñuelos ya fritos, justo antes de servir).
Step 5
Calienta una cantidad generosa de aceite de cocina en una sartén a fuego medio. Una vez que el aceite esté caliente, cubre ligeramente cada rodaja de calabacín (ya escurrida) con la mezcla para freír, y luego sumérgela en el huevo batido. Coloca con cuidado las rodajas de calabacín rebozadas en huevo en el aceite caliente. Fríe durante aproximadamente 2 minutos por cada lado, o hasta que adquieran un color dorado claro. Controla el fuego para evitar que se quemen. El objetivo es conseguir un color dorado uniforme y apetitos, sin que se doren demasiado.
Step 6
Una vez cocidos, transfiere los buñuelos de calabacín a un plato forrado con papel de cocina. Coloca otra hoja de papel de cocina encima de los buñuelos y presiona suavemente. Esto ayudará a absorber el exceso de aceite, resultando en un sabor y textura más limpios. Presiona con delicadeza para no aplastar los buñuelos.
Step 7
¡Tus deliciosos buñuelos de calabacín, ahora sin exceso de aceite, están listos! Sírvelos de forma atractiva en un plato y disfrútalos calientes para obtener el mejor sabor.

